Escrito por Rosa María Rodríguez y María Fernanda Mendoza / GIZ

La provincia de Sechura, conocida como la Capital Regional del Arte y la Cultura, se puso la camiseta azul y organizó el Festival SOMOS EBAMAR. Esta iniciativa de educación, cultura y ciudadanía ambiental, liderada por el Ministerio del Ambiente (MINAM), el Gobierno Regional de Piura y la Municipalidad Provincial de Sechura, y con el apoyo de la GIZ a través del proyecto EbAMar, arrancó al ritmo de las olas el 24 agosto y no paró hasta su cierre el 04 setiembre.

Como parte de las actividades de educación ambiental, se reunió a más de 120 sechuranos quienes se empaparon de aprendizajes sobre «Las maravillas naturales de Sechura» mediante charlas virtuales a cargo del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (SERNANP), la Municipalidad Provincial de Sechura, el MINAM, el científico Yuri Hooker, el proyecto EbAMar y PERUPETRO. Además, se realizó un concurso escolar de arte marino con más de 20 escolares de 5to de primaria a 5to de secundaria quienes, inspirados en la biodiversidad de su hermosa ciudad, retrataron sus ecosistemas y las riquezas que albergan.

Una gran fiesta marina se celebró en el desierto de Sechura / © GIZ

En el componente de ciudadanía ambiental, a través de la limpieza de la playa Reventazón en Illescas se logró sumar a 30 voluntarios quienes recogieron más de 600 kg de residuos; mientras que, en la limpieza de la playa Vista Hermosa en Parachique 30 voluntarios sumaron esfuerzos para recoger más de una tonelada de basura. Asimismo, 22 buzos pescadores recolectaron cerca de 850 kg de basura en la limpieza submarina más grande de Sechura alrededor del Desembarcadero Pesquero Artesanal Parachique.

En el componente de cultura ambiental, dos murales comunitarios llenaron de color y alegría a la ciudad de Sechura. Ambos resaltaron la importancia de la actividad ancestral de la pesca y la biodiversidad que abunda en el mar de Sechura. Además, el mar de Parachique fue escenario del pintado de dos lienzos bajo el mar por parte del artista Pascual Mimbela, quien retrató la dualidad de las riquezas marinas versus la acción humana.